Una nueva entrega de la Granja de Telecinco se emitió este jueves 15 de septiembre, pero en este caso y a diferencia del programa anterior, sí que contó con una parte de comentarios desde plató. Además, mostró la primera salida del concurso. Eso sí, de audiencia no remonta. Hizo un escaso 12% de share.
Eso sí, de audiencia no remonta. Hizo un escaso 12% de share.
Israel Arroyo perdió el primer juego de nominado contra Pipi Estrada y se convirtió en el primer nominado del reality. Marina tuvo que escoger a cuatro nuevos posibles nominados, que fueron Xavier, Nadia, Juan Alfonso y nuevamente a Pipi Estrada.
Pipi Estrada, primera salida
Los cuatro participaron en un nuevo juego del que saldría el nombre del segundo nominado. En ella, los cuatro concursante utilizaron el martillo para descolgar los tablones de la estructura de madera.
A continuación tuvieron que armar una escalera con ellos. El último que consiguiese subir a la plataforma y tocar la campana, se convertiría en la segunda salida. Pipi Estrada fue el participante que más dificultades ha tenido y perdió el juego.
Israel había sido el primer nominado del grupo, al que le siguió Pipi Estrada. Este segundo tuvo el privilegio de escoger a un tercero para que le acompañara en El Refugio, lugar donde mandan a los nominados.
El tertuliano deportivo escogió a Marco Ferri para que ocupara ese lugar, sin enterarse de que lo estaba nominando. “Pensaba que un compañero de convivencia iba a sumar. Pero ¿puedo cambiar? No lo escuché bien, hubiese escogido a Steisy. Yo no quería nominarlo, me lo tomé como que iba a ser una buena ayuda conmigo”, alegaba. Lara Álvarez no se lo permitió, por lo que los tres se marcharon como nominados.
Al pasar unos días, la presentadora reunió a todos los concursantes en El Consejo, desde donde todos pudieron salvar a uno de los tres. La mayoría votó por salvar al italiano, algunos al vidente y nadie a Pipi. Por lo que el primero pudo salir de la lista. Menudo tratamiento de belleza.
Elacercamiento entre Marina y Omar ha sido evidente los últimos días. Más aún cuando ella le escogió para compartir habitación privada. Ambos durmieron haciendo la cucharita y abrazándose. Hasta que una noche, él intentó besarla en el baño pero ella no quiso: “No quiero hacer nada a escondidas”, respondió.
La viceversa se fue a contarle a sus compañeras lo ocurrido, y explicó que le hacía desconfiar que quisiera hacerlo fuera de cámaras. Pero él llegó para asegurarle que la protegía a ella y que podía confiar en él porque cada vez estaba sintiendo más cosas y nada era inventado.
Así, los dos acabaron abrazados en la cama y mirándose a milímetros: “Nos entendemos con la mirada”, le decía ella, que finalmente inició el beso de la reconciliación. “Me imaginaba que iba a ser así. He sentido muchas cosas y estoy contento porque ya nos podremos dejar llevar”, añadió él.
En plató estaba Raquel Lozano -la ex del canario, a la que dejó para entrar en el reality- que aseguraba que se la creía a ella pero a él no: “A Marina sí me la creo, veo que siente, pero por parte de él creo que lo llevaba un poco preparado. No sé si después el roce habrá el cariño pero no me lo creo”.
