Un hombre se resbala al entrar al vagón de Metro y su pierna queda atrapada entre el coche y el andén.
¿Qué hacen los pasajeros? ¿Quejarse por el retraso? ¿Maldecir al hombre por haberles retrasado el viaje? Pues no, lo que hacen es arrimar el hombro y empujar el vagón para poder liberar a la víctima.
Y lo consiguen: