El concejal de Más Madrid, Pablo Soto, ha dimitido tras haber sido acusado de acoso sexual por una compañera. Para anunciarlo ha publicado una carta de dos partes que nos ha dejado perplejos tras la primera lectura. Más tarde se ha publicado que el partido conoció el caso el pasado lunes y activó el protocolo anti acoso por lo que le reclamaron inmediatamente su acta de concejal. Según el partido la versión de Pablo Soto no coincide con la de la víctima, a la cuál conceden «absoluta veracidad». Este es solo uno de los detalles extraños de la carta, vamos a analizarla:
El ex concejal dice estar en un estado de «choque psicológico» porque hace una semana le dijeron que una persona se había sentido acosada por él. En todo momento niega saber de quién se trata aunque narra la situación en la que presuntamente se produjeron los hechos. Luego vuelve a recalcar que, tras saber de qué situación se trataba, sigue sin saber «quién es».
¿Cómo no va a saber de quién se trata? Pues bien, suponemos que porque su discurso posterior es su argumento de defensa: cuenta que después del trabajo estaba tomándose «unas cervezas» con compañeros del trabajo y que como tiene una discapacidad importante a veces no puede ir al baño sin ayuda, por lo que a veces la pide. En este caso dice no recordar haberla pedido. ¿Por qué?
«Peso 45 kilos y unas pocas cervezas pueden sentarme realmente mal», explica. ¿Se está justificando? Cuenta que estando en el baño con esta persona, que recalca no saber quién es (¿cómo no va a saber a estas alturas de quién se trata, por muchas cervezas que se hubiese tomado?) le dijo, al parecer, algo (que vuelve a repetir que no sabe qué) de tono sexual. A continuación reconoce que es «un bocachancla» y que hace bromas sexuales pero solo con sus amigos y familia.
Luego dice que la persona que no sabe quién es se volvió a encontrar con él en una reunión de trabajo y que se volvió a sentir acosada, pero el tampoco sabe por qué. El caso es que según su versión, sin saber qué ha pasado, sin saber quién le acusa, sin saber por qué y sin recordar nada… dimite. ¿No es su carta un poco extraña?
