«Me casé en el 94, tenía 22 años y me casé así. Para mí fue un día maravilloso. Mi exmarido es un tipo estupendo, que encajó de maravilla ese look porque yo no sabía nada del vestido hasta el día de la boda. Yo quería un vestido sorpresa porque yo me aburro de todo. Muy parecida a la de ahora, cabezota, muy disciplinada, pero si ahora escucho poco antes escucho menos. Mi madre me dijo: ‘no te cases hija. Tu novio es maravilloso, pero tu tienes que volar’. Y yo no le hice caso y es verdad».
Continúa: «Siempre he pensado que pensado que si hubiera conocido al que fue mi marido diez años después, a lo mejor ahora estaríamos casados. Muchas veces no solo es la persona que escoges sino el momento. Empecé a trabajar en Madrid y él en Barcelona y cada vez estábamos más lejos el uno del otro. Me pasé tres años diciéndole que no era una buena mujer. Él era buen marido y yo una mala mujer».
«La decisión más importante de tu vida no es casarte sino con quien tienes tus hijos», declara la estilista.
Periodista y Graduado en Derecho. Experto en televisión, música y cine. Ha escrito en los principales medios de España y publica en Internet desde 2007.