Kiko Rivera protagoniza una exclusiva en Hola que podríamos calificar como “de tapadillo”: ni una ventana en portada para avanzar las aventuras del hijo deIsabel Pantoja. Hay dos motivos para la entrevista pactada: su inminente paternidad y su radical cambio de imagen. El hijo de Isabel Pantoja ha perdido más de veinte kilos y ha conseguido que nos enteremos de en qué cosiste ponerse una banda gástrica.
El ahora DJ confiesa que su vida ha cambiado porque antes de la banda mágica “llevaba una vida muy triste porque no se podía mover y sólo le apetecía estar tumbado” y revela detalles escabrosos como que “hay alimentos que no le pasan bien como las carnes de mucho grosor”.
“La ropa me sienta mucho mejor” y “es cierto que antes, al no sentarme tan bien, parecía más feo… Irremediablemente te vuelves un poco más presumido porque te ves más guapo”.

Periodista y Graduado en Derecho, combina la solidez académica con una mirada crítica y analítica sobre la cultura contemporánea. Su formación jurídica le aporta rigor y capacidad de contextualizar los fenómenos sociales, mientras que su experiencia periodística le permite comunicar con claridad, frescura y cercanía.
Experto en televisión, música y cine, ha seguido de cerca la evolución de la industria del entretenimiento durante más de una década. Su mirada se centra tanto en los grandes nombres como en las nuevas voces que marcan tendencia, ofreciendo un análisis que mezcla conocimiento técnico con pasión por la cultura popular.
Ha escrito en los principales medios de comunicación en España, participando en secciones de actualidad, crítica cultural y reportajes especializados. Su versatilidad le ha permitido cubrir desde entrevistas con artistas de primer nivel hasta análisis de fenómenos mediáticos y sociales.
Además, publica en Internet desde 2007, consolidándose como uno de los primeros periodistas de su generación en comprender el poder de lo digital como espacio de creación y conversación. Su trabajo en la red ha contribuido a abrir debates, difundir tendencias y acercar la cultura a una audiencia global.
Con un estilo propio que combina profesionalidad y cercanía, sus textos buscan siempre informar, entretener y provocar reflexión en quienes los leen.
