El impactante show que dio Will Smith con Chris Rock en los Oscar 2022 no impidió que el comediante disfrutara el resto de su noche: fue visto de fiesta en la fiesta anual de su mejor amigo Guy Oseary, el manager de Madonna.
Fuentes de la gala dicen que tras el suceso, Chris Rock continuó como si nada y que se le pudo ver con una actitud completamente normal. Después de la gala, se fue directo a la fiesta de Guy Oseary y todos los asistentes recalcan que todo fue normal.
Aun así, se nos dice que sus compañeros asistentes a la fiesta se unieron a él para asegurarse de que «las cosas no se pusieran raras» si Smith también aparecía en la fiesta.
Según asistentes, Chris Rock simplemente “Estaba hablando de lo que había pasado, solo decía que era una locura, pero no parecía estar molestándolo en absoluto”.
Por otro lado P.Diddy, que fue pareja de Jennifer López, ha dicho para sorpresa de muchos que Will Smith y Chris Rock han hablado y han hecho las paces. «Son como hermanos, es todo amor. Ya está todo arreglado»
«Ellos fueron y lo arreglaron». Otras fuentes dicen que esto no ha ocurrido y que P.Diddy habla por hablar y sin saber.
La desmedida reacción del actor a un chiste sobre su esposa ha empañado los premios de la Academia y llenado las redes, pero hasta entonces los tuiteros ya se habían encargado de comentar a través de memes uno de los eventos más influyentes para la cultura popular de cada año
La galleta de Will Smith a Chris Rock
La 94ª edición de los Premios Oscar parecía destinada a ser la del reencuentro con la normalidad.
Pero la incomodidad y la estupefacción ante un momento, la galleta de Will Smith a Chris Rock, que ya es historia, se adueñaron entonces de la conversación digital y también de un espectáculo que aspiraba a ser histórico por razones muy diferentes, como su diversidad o el inesperado triunfo de CODA: Los sonidos del silencio.
Sobre la alfombra roja, pocas horas antes, nada parecía que pudiera ganar los atrevidos atuendos de Kristen Stewart (nominada por Spencer), vestida de Chanel con unos minúsculos shorts, o Timothée Chalamet, que apareció con un traje de Louis Vuitton sin camisa.
No obstante, el ambiente no tardó en ponerse de aquella manera debido a la decisión de la Academia de entregar este año ocho galardones fuera del directo, entre ellos el de mejor montaje, mejor banda sonora o mejor cortometraje de animación, este último conquistado por el español Alberto Mielgo, director de El limpiaparabrisas.
Así, mientras muchas estrellas continuaban posando sobre la alfombra roja y concediendo entrevistas, fuera de emisión se entregaban unos premios que, de forma insólita, el público ha podido conocer por los tuits de los periodistas allí presentes.
Más tarde, los vídeos de las diferentes entregas se incorporaron (editados para agilizar su ritmo) en falso directo.
Personalidades como Jessica Chastain (nominada y, finalmente, ganadora del Oscar a la Mejor Actriz por Los ojos de Tammy Faye) o Guillermo del Toro (director de la candidata a Mejor Película El callejón de las almas perdidas) redujeron su presencia a la alfombra roja para apoyar a los profesionales de las categorías apartadas. Del Toro, incluso, llegó a retransmitirlo al mundo con imágenes desde el teatro.
ras un inicio con Beyoncé interpretando su canción Be alive, nominada por El método Williams, en un gran campo de tenis y vestida de verde, Amy Schumer sacudió el teatro Kodak con un monólogo donde lanzó, entre otras, bromas a costas de Leonardo DiCaprio, protagonista de No mires arriba, su preocupación por la situación climática y la edad de sus parejas, que, como sabemos, finalmente estuvo lejos de ser el chiste más famoso de la noche.
Periodista y Graduado en Derecho. Experto en televisión, música y cine. Ha escrito en los principales medios de España y publica en Internet desde 2007.