Maite, la Galdeano, ha estado muy activa en sus redes sociales desde el otro día para visibilizar todo lo que ha pasado en Marruecos. En uno de sus ‘stories’ ha puesto un link al proyecto de reconstrucción de las casas de La Medina. Ha dicho que es un proyecto de sus amigos y al ver la lista de donantes, buscando cuánto había donado Maite, hemos descubierto que no ha donado nada.

Fiel a su eslogan: “guardar, guardar, guardar…” parece que no ha visto conveniente donar ni un euro para la causa que para eso ya ha puesto ella el escaparate de su cuenta oficial de Instagram con miles de seguidores.

El texto del GoFundMe dice: “Me llamo Ismael, vivimos y trabajamos en Marrakech. Muchos de nuestros vecinos tienen sus casas y algunos han perdido su vida. Queremos dedicar todo este dinero a rehabilitar sus hogares para pagar las obras de reparación. Muchas familias están formadas por madres que no tienen trabajos ni ingresos y ningún organismo oficial da apenas ayudas. Podrás seguirnos en nuestras redes sociales para ver cómo hacen la reconstrucción.”

El objetivo es bastante ambicioso, 250.000 euros, pero de momento solo llevan 475 euros de 14 donativos entre los que no figura el nombre de Maite. Bueno, para ser exactos, sí hay una donación que podría ser ella, ya que pone “Anónimo” y ha puesto 20 euros.

Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, donde descubrió su pasión por contar historias que conectan con las personas y reflejan la cultura de su tiempo. Su trayectoria profesional está marcada por un interés constante en la música, los medios de comunicación y la forma en que ambos influyen en la sociedad.
Fanático de la música y de las listas de éxitos, sigue con detalle la evolución de los géneros, los artistas emergentes y los fenómenos virales que marcan tendencia a nivel global. Su curiosidad lo lleva a analizar no solo los números, sino también lo que hay detrás de ellos: los movimientos sociales, las narrativas artísticas y la influencia de la industria musical en la vida cotidiana.
Amante declarado de la estética videoclip, entiende este formato como un lenguaje artístico en sí mismo, donde música e imagen se fusionan para contar historias poderosas y crear iconos culturales. Su mirada combina análisis crítico con entusiasmo de fan, lo que le permite escribir desde la objetividad periodística sin perder la frescura de la pasión personal.
Con experiencia en redacción digital y un estilo cercano, su trabajo refleja un equilibrio entre la actualidad informativa y la sensibilidad cultural. Su objetivo es que cada pieza que escribe no solo informe, sino que también entretenga, emocione y conecte con la audiencia.
