Marc Moskowitz es un hombre de 66 años que ha demandado al gimnasio Bally de Nueva York por haberse resbalado con una «mancha blanca» que había en el suelo y haberse roto un hombro. Moskowitz dice que esa zona del gimnasio es un sitio de cruising y él, que no es gay y que por tanto no la usa, está indignado.
La mancha blanca podría ser cocaína, pero la coca no tiene pinta de resbalar mucho. ¿Qué más podría ser? Blanco y que resbale…
– Una mancha de Actimel
– Una pizca de mayonesa
– Semen
Al parecer Marc Moskowitz se inclina por la tercera opción y seguramente gane el juicio. La sauna del gimnasio Bally sale hasta reseñada en una guía de cruising en la que explican que si una de las dos luces que hay está apagada es hora del folleteo.
Chicos, llevad cuidado en el gimnasio.
Periodista y Graduado en Derecho. Experto en televisión, música y cine. Ha escrito en los principales medios de España y publica en Internet desde 2007.