El Gran Wyoming acaba de publicar sus memorias tituladas ‘¡De rodillas, Monzón!’ en las que cuenta cosas que nunca se había atrevido a contar en público. Por ejemplo, desvela que su niñez estuvo muy marcada por la ausencia de su madre, ingresada por aquella época en un sanatorio por lo que ahora conocemos por depresión.
«Tenía una depresión profunda, muy grave, y de esto no se hablaba. Nos decían que no dijéramos nada, porque iban a decir que estaba loca», ha relatado Wyoming a Gemma Nierga ,en la SER, según publica la web líder en televisión, EcoTeuve. «Íbamos al sanatorio a verla los fines de semana. Eso se normalizó, pero eso se paga y tiene un precio», ha dicho recordando a su madre. «Ahora quiero, pero quiero poco. Y eso me lo cuentan mis parejas».
De esta manera ha explicado que actualmente es poco cariñoso o efusivo con la gente que quiere, como por ejemplo sus hijo. «No estoy acostumbrado a que me soben, a que me toquen, a que me abracen…»
Periodista y Graduado en Derecho. Experto en televisión, música y cine. Ha escrito en los principales medios de España y publica en Internet desde 2007.